El carruaje


carruaje

Érase una vez un hombre al que le habían dejado un regalo en la puerta de su casa. Al salir, vio un hermoso carruaje de madera de nogal, con adornos en bronce y lámparas de cerámica. Tenía un elegante asiento aterciopelado y unos laboriosos visillos de encaje. Las medidas estaban diseñadas exclusivamente para él, era cómodo y sofisticado a la vez.

Una vez dentro, el hombre miró por la ventana para ver el paisaje que le rodeaba y pensó en la suerte que tenía de tener aquel obsequio. Pero al poco rato comenzó a aburrirse de ver siempre lo mismo, de manera que aquel regalo dejó de entusiasmarle. Al escuchar sus quejas, uno de sus vecinos le dijo:

  • “¿No ves que te faltan los caballos?”

Entonces el hombre fue apresuradamente al establo a por dos equinos que enganchó a su carro. Cuando éstos arrancaron, el paisaje empezó a cambiar, volviéndose distinto, maravilloso…

Tras un tiempo cabalgando notó como el carruaje se desequilibraba. Los caballos parecían desbocados y lo conducían por terrenos tortuosos. El hombre no tenía control ninguno y al encontrarse de nuevo con su vecino, le dijo indignado que aquel carruaje no servía para nada, a lo que éste le contestó que también necesitaría un cochero. El hombre contrató a un mayoral, un hombre serio y formal que sabía cómo controlar la situación, qué velocidad llevar y qué ruta seguir. ¡Ahora sí podría disfrutar del viaje!

Moraleja

Al igual que el carruaje, nuestro mayor regalo es nuestro cuerpo y aunque el tiempo cambiará algunos aspectos y producirá ciertos daños, siempre será quien nos acompañe en nuestro viaje. Los caballos que tiran de él son nuestros impulsos y pasiones, pero que no siempre se pueden controlar y que necesitan de la cabeza, la lógica y la razón para que a modo de cochero nos guíen por el mejor sendero.

De: http://www.vitasalud.com/

Día mundial contra el cáncer de mama


lazo rosa 2

El diagnóstico precoz es el arma más eficaz para luchar contra el cáncer de mama. Si la enfermedad se detecta a tiempo, se cura en la mayoría de los casos, las mujeres debemos concienciarnos de la importancia de hacernos una mamografía como la mejor forma de diagnosticar precozmente esta enfermedad.

Francisco González-Robatto, presidente de la Asociación Española contra el Cáncer (aecc), señala:

“Las mujeres con edades comprendidas entre 40/50 y 65/70 años deben realizarse mamografías al menos cada 2 años, incluso aunque no presenten síntomas. El objetivo de esta campaña es hacer llegar el mensaje de la detección precoz como el arma más eficaz para luchar contra esta enfermedad, dado que el porcentaje de curación de los tumores de mama diagnosticados en su etapa inicial es de cerca del 97%”

La celebración de este día es una oportunidad para destacar mensajes concretos relacionados con la detección precoz del cáncer de mama. Una oportunidad que permite que el mensaje de salud salga a la calle y llegue al conjunto de los ciudadanos, mujeres, varones, niños y jóvenes.