Tradicionalmente, la Cofradía de Nuestro Padre Jesús llamado “El Rico” y Mª Stma. del Amor libera un preso todos los años en Málaga (España) gracias a la leyenda que a continuación expongo:
Cuentan que en tiempos de Carlos III una grave epidemia de peste asoló la ciudad de Málaga, pereciendo un gran número de personas.
La debilidad de los supervivientes hacia difícil el celebrar procesiones rogativas implorando el fin de la epidemia.
Uno de los lugares en los cuales la enfermedad no había atacado con tanta virulencia era la prisión. Los reclusos, sabedores de lo que sucedía fuera de los muros en los que se encontraban privados de libertad, pidieron al alcaide el poder salir para sacar en procesión a la venerada Imagen de Nuestro Padre Jesús titulado «El Rico».
Ante la negativa de la Autoridad, por el fundado temor a que los reclusos pudieran aprovechar la circunstancia para evadirse, éstos decidieron amotinarse, cumpliendo con la promesa de realizar la procesión solicitada.
Tras la misma, regresaron, tal y como habían prometido, todos al presidio menos uno de ellos que lo hizo al día siguiente, portando una cabeza de San Juan Bautista Degollado, que colocó junto a la cama de un compañero, también preso, que se encontraba enfermo, y que, al igual que el resto de la población de Málaga, sanó a los pocos días del suceso.
El Rey, conmovido ante la generosa acción de los presos, dictó un Decreto por el cual, cada año, durante la procesión de «El Rico» se le concedería la libertad a un recluso.
Esta tradición se ha mantenido hasta nuestros días, y S.M. Don Juan Carlos I sigue firmando el Decreto de Libertad cada año, acompañando el preso a » El Rico» durante su recorrido por las calles de la ciudad, tras una solemne ceremonia en la sede de la Subdelegación del Gobierno en la que se le lee al preso el Edicto de Libertad y, lo que es más importante, recibe arrodillado la Bendición de Nuestro Padre Jesús » El Rico», merced a que es una talla que presenta su brazo derecho articulado.
E ste año Jesús El Rico liberará el Miércoles Santo a J. P. G., un agente de seguros condenado por una estafa de 40.000 euros cometida hace diecisiete años. El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicaba ayer la concesión del indulto, que fue aprobada por el Consejo de Ministros celebrado el pasado viernes en Sevilla. Se rompe así con la tradición de anunciar esta medida de gracia el Viernes de Dolores. Este cambio sorprendió a la Cofradía de El Rico, que ayer no tenía aún conocimiento oficial del indulto.
J. P. G. fue condenado en 2001 por la Sección 3ª de la Audiencia Provincial de Málaga a tres años de cárcel y seis meses de arresto por delito de falsedad en concurso con un delito de estafa y otro de apropiación indebida. La estafa fue cometida entre 1993 y 1995 a través de unas primas de seguros en las que resultaron perjudicadas una decena de personas.
En la terna de internos propuesta para el indulto por la cárcel de Alhaurín de la Torre e informada de forma favorable por la Audiencia Provincial de Málaga al Ministerio de Justicia, J. P. G. era el mejor situado de los tres presos, dado que había resarcido a las víctimas con la devolución de las cantidades defraudadas.
El reo debió ingresar recientemente en prisión, ya que le quedaba casi la mayor parte de la pena aún por cumplir y actualmente se encontraba en el Centro de Inserción Social, donde los internos sólo van a dormir.